ENDIS
La ENDIS establece el marco general de la política de desarrollo e inclusión social, brindando orientaciones para el diseño, implementación, seguimiento y evaluación de intervenciones públicas dirigidas a la inclusión social y económica de la población más pobre y vulnerable del país, para el desarrollo humano, bienestar y ciudadanía plena, con igualdad, libertad, justicia social y sostenibilidad.
La política de desarrollo e inclusión social prioriza a aquellas personas en situación de mayor pobreza y vulnerabilidad, que no logran ser cubiertas por la política social universal. Para ello, la ENDIS se aplica a través de un modelo que abarca tres horizontes temporales complementarios: corto, mediano y largo plazo.
- Para el corto plazo, el esfuerzo está centrado en el alivio temporal de los hogares a través de programas de asistencia directa;
- En el mediano plazo, el énfasis está colocado en el desarrollo de capacidades orientadas a mejorar el acceso de los hogares a servicios e infraestructura básica y a incrementar su autonomía en cuanto a la generación de ingresos y procesos de inclusión financiera;
- Para el largo plazo, las intervenciones están orientadas a la generación de oportunidades para la siguiente generación con énfasis en la promoción de la protección y mejora del capital humano – nutrición, salud y educación de calidad.
El compromiso de la Política de Desarrollo e Inclusión Social es reducir las brechas existentes, absolutas y relativas, entre las poblaciones con mayores y menores necesidades a través de políticas y programas sociales articulados, favoreciendo el acceso a los servicios sociales, de modo que impacte en el alivio de la pobreza, y garantizar que se atienda de modo prioritario a aquella población que tenga mayores carencias y vulnerabilidad.
Son principios orientadores de la ENDIS, el enfoque del hogar desde una perspectiva de ciclo de vida, la gestión por resultados y el enfoque territorial; considerándose como aspectos transversales relevantes para la implementación de la ENDIS, los aspectos de interculturalidad, discapacidad y equidad de género.
La ENDIS toma como referencia el ciclo de vida de la persona para lo que se identifican 5 ejes estratégicos:
- Nutrición infantil (0-3 años)
- Desarrollo infantil temprano (0-5 años)
- Desarrollo integral de la niñez y la adolescencia (6-17 años)
- Inclusión económica (18-64 años)
- Protección del adulto mayor (65 años a más)
La intervención en torno a cada uno de estos ejes involucra una estrecha coordinación con los sectores y gobiernos regionales y locales. La rectoría del MIDIS para la política focalizada de desarrollo e inclusión social complementa las rectorías del resto de sectores para las políticas sociales universales. Se reconoce el importante rol del MINSA para todos los ejes, y en especial para el eje 1. A su vez, es importante la articulación con el MIMP, en tanto ente rector del Sistema Nacional de Atención Integral al Niño y al Adolescente, así como de la promoción y protección de los derechos de las personas adultas mayores. Asimismo, se reconoce la importancia de un trabajo coordinado con sectores como Educación, con intervención directa en los cuatro primeros ejes (desde los programas de educación temprana para menores de 3 años, hasta la formación técnica no universitaria).